España tuvo
un rendimiento colectivo muy irregular, empató 1-1 ante Italia en Turín y
tendrá que mejorar algunos detalles.
España se enfrentó a Italia (Fotografía: RTVE)
La selección
española tuvo un discreto primer tiempo, en el segundo tiempo mostró por un
corto periodo un estilo de juego consistente hasta que se puso en ventaja
después sufrió y tras la falta infantil de Sergio Ramos dentro del área marcó un punto de quiebre. Italia con el
empuje de su público supo aprovechar ese detalle, aunque tuvo todos los
argumentos para adjudicarse con la victoria la azurra aún continúa en deuda y
el camino es de largo aliento.
Albania será
un rival muchísimo más complicado, porque su principal virtud es saber jugar
muy bien de contragolpe. La roja tendrá
que ponerse a punto demostrar con argumentos futbolísticos porque está
considerada como favorita a ganar su grupo clasificatorio pensando en la próxima
justa mundialista que se celebrará en Rusia.
Macedonia es
la otra cara de la moneda, aunque su selección es de menor jerarquía en este maravilloso deporte
cualquier cosa puede pasar. Ambas tendrán que reivindicarse, la carrera
es muy larga, nosotros como aficionados sólo nos queda disfrutar de cada
momento grato.
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